Romero López, Cristian Camilo. Crocodylus Acutus; Cocodrilo del Magdalena, Cocodrilo Americano o Caimán Aguja

(Todas las fotos así como el vídeo presentados en este blog fueron tomados por Cristian Camilo Romero López en Octubre de 2015)

UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL

FACULTAD DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA

DEPARTAMENTO DE BIOLOGÍA

EJE CURRICULAR DIVERSIDAD

DIVERSIDAD BIOLÓGICA 1

BIOTA COLOMBIANA

Nombre Científico:

Crocodylus acutus (Cuvier, 1807)

Fig 1. Crocodylus acutus.

Nombres Comunes:

Cocodrilo del Magdalena, Cocodrilo Americano, Caimán Aguja, Kayuüshi (Wayuu)

Posición Taxonómica:

• Phylum: Chordata
• Subphylum: Vertebrata
• Clase: Reptilia
• Orden: Crocodylia
• Familia: Crocodylidae
• Género: Crocodylus
• Especie: Crocodylus acutus

Descripción Física:

Los cocodrilos del Magdalena son cocodrilos de tamaño moderado respecto a otros representantes del mismo género, aunque algunos individuos pueden crecer más de 4 metros. Hay informes no confirmados de individuos de 7m de largo. Los machos por lo general son más grandes que las hembras. Los adultos tienen una coloración marrón oliva (Fig. 1), mientras que los cocodrilos más jóvenes son de color bronceado (Fig. 2). Tienen una cabeza estrecha y un hocico largo (lo que los distingue de los caimanes o babillas - Caiman crocodilus -), poseen dientes afilados enclavados entre sí. Tienen de 28 a 32 dientes en su mandíbula inferior y de 30 a 40 en el maxilar superior. También tienen un párpado protector que les permite ver bajo el agua y el diseño de su iris les da una buena visión nocturna.

Fig. 2. Ejemplar pre-juvenil de Cocodrylus acuatus

Los cocodrilos del Magdalena son distintos de otras especies de cocodrilos pues tienen una cantidad reducida de escamas como armadura. Su cola es muy larga y de gran alcance, y la utilizan para nadar (MacKinnon & Fishman, 2009)

Distribución:

El cocodrilo americano como también se le conoce ocupa los territorios de Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Islas Caimán, Jamaica, Martinica, México, Nicaragua, Panamá, Perú, República Dominicana, Trinidad y Tobago, EUA (sur de la Florida) y Venezuela (The Reptile Database 2013). La especie se distribuye tanto en el territorio costero continental como en el insular, aunque los registros en este último son más bien esporádicos (p. e. Isla de Margarita en Venezuela o San Andrés y Archipiélago de San Bernardo en Colombia). 

Mapa 1. Distribución geográfica de Crocodylus acutus. Tomado de: http://www.naturalezaycultura.org/spanish/htm/news/2015-02-Cocodrilo.htm 

Para el caso de Colombia en específico abarca las cuencas. del Caribe, Magdalena y Pacífico. Específicamente las siguientes subcuencas: 

• Caribe (Atrato, Catatumbo, Islas del Rosario, Isla San Bernardo, Isla Fuerte y Tortuguilla, Nuevo Presidente, Las Piedras, San Miguel, Sardinata, Sinú, Tibú); 
• Magdalena (Cauca, San Jorge) (Medem 1981, Ulloa 2011); 
• Pacífico (Mira) (Rodríguez 2000, Citado por Morales et al, 2013).

Ecología:

Hay una diferencia marcada en la dieta durante la ontogenia. Así es predominantemente insectívora en los neonatos y pasa a ser mayoritariamente piscívora en adultos. Los neonatos y juveniles se alimentan de insectos acuáticos, cangrejos, peces pequeños y anfibios. 

Vídeo 1. Trabajador de "Ciudad Reptilia" alimentando un cocodrilo del Magdalena (2015)

Tomado de: https://www.youtube.com/watch?v=HMmHLUMuuUY

Los adultos se alimentan de moluscos, crustáceos, peces más grandes, tortugas, iguanas, otros caimanes, aves y mamíferos (Medem 1981, Rueda-Almonacid et al. 2007). En bahía Portete (La Guajira) se ha reportado el consumo de equinodermos (Corpoguajira y Asociación Desarrollo Guajiro 2006).

En el vídeo se logra ver un comportamiento que no es común en un individuo en libertad, puesto que como se observa el cocodrilo abre repetidamente sus fauces para tomar el trozo de alimento que se le ofrece. Normalmente el cocodrilo debería tomar su presa y nunca soltarla hasta que haya muerto.

Historia de Vida y Comportamiento:

Fig. 3. Neonato de Cocodrilo del Magdalena

Crocodylus acutus tiene el potencial de vivir hasta 100 años, sin embargo, su esperanza de vida media oscila entre 60 a 70 años . Hay una alta tasa de mortalidad de la descendencia debido a factores como la vulnerabilidad en la eclosión, los cocodrilos americanos jóvenes aún no han desarrollado el tamaño y la fuerza necesaria para protegerse de los depredadores y se convierten en presas potenciales para otros animales (Fig. 3). Su estado vulnerable, junto con la falta de atención de sus padres pone a los jóvenes en riesgo.

Además, si se construyen nidos debajo de la superficie de cuerpos de agua, las inundaciones pueden causar la muerte en masa de los huevos. Y, los propios huevos están en riesgo a los ladrones tales como mapaches u otros mamíferos.

Fig. 4. Huevos en incubación artificial

La mayor parte de la vida de los cocodrilos, son criaturas solitarias. En su hábitat natural, prefieren estar solos, alejándose de zonas con mucho disturbio acústico. Sin embargo, si se sienten amenazados, los individuos pueden llegar a ser bastantes agresivos. Cuando las interacciones sociales ocurren, a menudo se llevan a cabo al amanecer antes de que su temperatura corporal haya incrementad.

Durante la estación seca se vuelven letárgicos, enterrándose en el lodo y dejando de comer. Como los caimanes, los cocodrilos americanos toman el sol con la boca abierta, un comportamiento llamado "gaping: estar boquiabierto". Esto regula su temperatura corporal. Este comportamiento se produce sólo en los días soleados y actúa como un método de enfriamiento para ayudar a mantener su cómoda temperatura corporal de 77 grados Fahrenheit. Además, este comportamiento de tomar el sol ayuda a aumentar su tasa metabólica; en la temperatura fría, su digestión tiende a ser más lenta, con un costo extra de energía, tomando el sol hace que la digestión sea más eficiente (Fig. 5).

Fig. 5. Crocodylus acutus tomando el sol

La mayor parte de su comportamiento y la actividad se produce por la noche, están inactivas durante las horas diurnas. Durante la noche, pasan mucho tiempo sumergidos en el agua ya que el agua se enfría lentamente, manteniendo el calor durante un período prolongado de tiempo.

Fig. 6. Cocodrilo del magdalena sumergido

Conservación:

Los cocodrilos americanos están en peligro de extinción bajo la Ley de Especies en Peligro de Estados Unidos. Están protegidos por la convención sobre el comercio internacional de especies amenazadas a nivel internacional, esto prohíbe el comercio de cocodrilos.

En el caso de Colombia es una especie amenazada según categoría IUCN (Castaño-Mora, 2002): En peligro crítico (CR) sin embargo su población ha ido aumentado en el transcurso de los últimos años. En la categoría global IUCN se cataloga como vulnerable (VU).

En el pasado, estaban sujetos a la caza furtiva por su piel, pero ahora la principal amenaza para su existencia es la pérdida hábitat debido a la invasión del desarrollo humano y la matanza ilegal. 

Importancia:

• Importancia intrínseca 
• Importancia ecológica como consumidor secundario o terciario en las redes tróficas
• Importancia económica: Su piel se utiliza como materia prima para la elaboración de zapatos, bolsos o carteras. En Colombia existen zoo-criaderos autorizados con este fin.
• Importancia médica: En la medicina tradicional los huesos del cráneo se maceran hasta convertirlos en polvo y se utiliza para la curación de llagas o cicatrices (Morales et al. 2013) 

Referencias bibliográficas: 

Castaño- Mora, O.V. (Ed). 2002. Libro rojo de reptiles de Colombia. Libros rojos de especies amenazadas en Colombia. Instituto de Ciencias Naturales - Universidad Nacional de Colombia, Ministerio del Medio Ambiente, Conservación Internacional - Colombia. Bogotá, Colombia.

MacKinnon, K., & Fishman, J. (2009). Crocodylus acutus - American crocodile. (ADW, Productor) Obtenido de Animal Diversity Web: http://animaldiversity.org/accounts/Crocodylus_acutus/

Morales-Betancourt, M. A., C. A. Lasso, J. De La Ossa V. y A. Fajardo-Patiño (Editores). 2013. VIII. Biología y conservación de los Crocodylia de Colombia. Serie Editorial Recursos Hidrobiológicos y Pesqueros Continentales de Colombia. Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt (IAvH). Bogotá, D. C., Colombia, 336 pp.